RÍO DE JANEIRO – Las autoridades brasileñas arrestaron a cinco policías acusados de intentar revender un rifle incautado durante una redada que mató a 122 personas en Río de Janeiro el mes pasado, dijo el viernes la policía militar del estado.
La operación del 28 de octubre, la más mortífera jamás realizada en Brasil, dejó 117 presuntos pandilleros y cinco policías muertos: cuatro el día de la operación y otro una semana después por las heridas sufridas durante la misma.
Los agentes supuestamente entregaron uno de los casi 100 rifles incautados a pandilleros, según descubrieron las autoridades después de examinar imágenes de las cámaras corporales utilizadas por los agentes de policía el día de la operación.
El arma estaba destinada a ser revendida al crimen organizado, dijo a Reuters una fuente cercana al asunto.
La policía militar dijo en un comunicado que “no toleran ninguna mala conducta o delito cometido por sus miembros y castigarán severamente a los involucrados si se prueban tales actos”. Reuters


















