Un sacerdote católico que se hizo pasar por un skinhead de 16 años en salas de chat neonazis donde amenazaba con bombardear mezquitas como parte de su “fetiche sexual” ha evitado la cárcel.
El padre Mark Rowles, de 57 años, publicó bajo el nombre ‘skinheadlad1488’ en una sala de chat racista llamada Aryan Reich Killers, donde escribió mensajes racistas y ofensivos.
Rowles escribió varios mensajes en Telegram, incluido uno en el que escribió “bombardear mezquitas”.
El sacerdote, que residía en la iglesia católica St John Lloyd, en Cardiff, confesó tres cargos de envío de mensajes amenazantes u ofensivos utilizando la aplicación Telegram en mayo y junio de 2024.
El jueves, a Rowles se le ordenó pagar £199, realizar 150 horas de trabajo no remunerado y se le impuso una orden de conducta criminal de tres años.
Se entiende que la Iglesia Católica de Gales está llevando a cabo una revisión del asunto, ya que un portavoz confirmó que el sacerdote había sido suspendido y no había estado en el ministerio activo desde que surgieron las acusaciones.
Una investigación antiterrorista sobre la actividad de extrema derecha en línea descubrió las acciones del hombre de 57 años, y más tarde fue detenido.
En un mensaje, utilizó un insulto racial extremo y añadió: “Deberían colgarlos a todos y fusilarlos”.
El padre Mark Rowles, de 57 años, publicó bajo el nombre ‘skinheadlad1488’ en una sala de chat racista llamada Aryan Reich Killers, donde escribió mensajes racistas y ofensivos.
Ahora, el sacerdote que se hizo pasar por un skinhead de 16 años en salas de chat neonazis donde amenazaba con bombardear mezquitas como parte de su “fetiche sexual” ha evitado la cárcel.
Y al hablar del origen étnico de los londinenses, escribió: “Unas cuantas balas en el cerebro ayudarían”.
Cuando fue arrestado e interrogado por la policía, Rowles dijo a los agentes que no era racista, pero que se sentía solo y tenía un “fetiche sexual por los juegos de roles”.
Su foto de perfil mostraba a un joven blanco con el rostro cubierto con una bandera alemana y las palabras “siempre por el camino derecho”, según escuchó el tribunal.
El fiscal Rob Simkins dijo que las publicaciones de Rowles mostraban “hostilidad basada en la religión y la raza”.
Jacqui Seal, en su defensa, dijo: “Claramente este es un caso inquietante. A lo largo de su vida en la Iglesia Católica nunca ha sido objeto de denuncia o medida disciplinaria.
“No tiene condenas previas”.
