Después de casi tres décadas de planificación y construcción, el observatorio más alto del mundo ha comenzado sus operaciones hoy. El Observatorio Atacama de la Universidad de Tokio (TAO), que se encuentra a una altitud de 5640 metros en la cima del Cerro Chajnantor en el norte de Chile, se ha inaugurado oficialmente. El telescopio infrarrojo será utilizado para mejorar nuestro entendimiento del universo, así como del origen de la vida.
A tal altura, los cielos claros y la escasa cantidad de vapor de agua en la atmósfera hacen que Atacama sea uno de los mejores lugares del mundo para la astronomía infrarroja terrestre. Construido por la Universidad de Tokio, el telescopio, que puede ser controlado de manera remota, incluye un espejo primario de 6.5 metros que ha sido desarrollado en el Laboratorio de Espejos Richard F. Caris de la Universidad de Arizona.
El observatorio cuenta con dos instrumentos espectrográficos. El Espectrógrafo Multiobjeto Infrarrojo de Campo Amplio y Colores Simultáneos (SWIMS) abarcará un rango de longitud de onda de 0.9 a 2.5 micrómetros para observar grandes áreas del cielo. SWIMS será utilizado para estudiar galaxias, así como la evolución de los agujeros negros supermasivos que existen en sus centros.
Por otro lado, el Imagenógrafo Multimodo en el Infrarrojo Medio para Mirar el Universo Desconocido (MIMIZUKU), operará entre 2 y 38 micrómetros. MIMIZUKU se utilizará para entender mejor la naturaleza química del polvo orgánico en el universo, lo que puede revelar detalles sobre la evolución de diferentes materiales, incluidos aquellos que condujeron a la creación de la vida.
Takashi Miyata, de la Universidad de Tokio, quien está a cargo de la gestión de la construcción del observatorio, ha trabajado en el TAO durante más de 20 años y dice estar “muy emocionado” por el inicio de las observaciones.
“Gracias a la altura y al ambiente árido, el TAO será el único telescopio terrestre en el mundo capaz de observar claramente las longitudes de onda del infrarrojo medio,” agrega. “Esta área del espectro es extremadamente buena para estudiar los ambientes alrededor de las estrellas, incluyendo las regiones donde se forman planetas”.