SOFÍA, 2 de diciembre – El gobierno de Bulgaria retiró el martes su plan presupuestario para 2026, redactado inicialmente en euros antes de que el estado miembro de la UE adopte la moneda el 1 de enero, luego de protestas a nivel nacional contra los aumentos de impuestos planeados para financiar un mayor gasto.
El gobierno minoritario del primer ministro Rosen Zhelyazkov pidió al parlamento que retirara el presupuesto en un comunicado.
“El gabinete introducirá un nuevo sistema presupuestario después de la decisión del parlamento”, dice el comunicado. Una comisión parlamentaria adoptó el plan presupuestario en primera lectura el 18 de noviembre.
Miles de personas se unieron el lunes por la tarde a las protestas en la capital, Sofía, y en varias otras ciudades, contra el proyecto de presupuesto.
Los búlgaros están descontentos con la corrupción estatal y el aumento de impuestos
Los partidos de oposición y otras organizaciones dicen que estaban protestando contra la corrupción estatal, así como contra los aumentos de impuestos sobre las contribuciones a la seguridad social y los dividendos para financiar un mayor gasto.
“El proceso de rehacer el presupuesto será difícil, con un mayor escrutinio por parte de los sindicatos, los grupos empresariales y el público”, dijo Mario Bicaraschi, analista senior para Europa de la firma de inteligencia de riesgos Verisk Maplecroft.
“Existe un amplio consenso sobre la necesidad de prudencia fiscal. Sin embargo, los repetidos intentos de aumentar los impuestos podrían exacerbar aún más las tensiones sociales”, añadió.
Aproximadamente la mitad de los búlgaros se oponen a la adopción del euro, por temor a que afecte la soberanía nacional y que los minoristas aprovechen el cambio de la moneda de impuesto nacional al euro para aumentar los precios.
La semana pasada, el gobierno prometió volver a presentar el plan de gasto para 2026 al parlamento después de protestas callejeras anteriores, diciendo que daría más tiempo para consultas con la oposición, los sindicatos y los empleadores.
El viceministro de Trabajo y Política Social, Ivan Krastev, advirtió el martes que los pagos a quienes viven por debajo del umbral de pobreza se verán afectados si no se adopta un nuevo presupuesto, informó la agencia de noticias búlgara BTA.
“Espero que los participantes en este proceso encuentren sentido común y sentido político para proteger a los grupos más vulnerables de nuestra sociedad”, afirmó. Reuters
