El Kremlin acogió con satisfacción la decisión de la administración del presidente estadounidense Donald Trump de revisar su estrategia de seguridad nacional y dejar de llamar a Rusia una “amenaza directa”, dijo el portavoz Dmitry Peskov en comentarios publicados por la agencia de noticias TASS el 7 de diciembre.
Rusia desde 2014 y su anexión de Crimea
2022 Invasión a gran escala de Ucrania,
La estrategia estadounidense identifica a Moscú como una amenaza importante. Sin embargo, la política estadounidense actualizada, anunciada el 5 de diciembre, adoptó un tono más suave y pidió una cooperación limitada.
En comentarios a la agencia de noticias estatal, Peskov dijo que la estrategia actualizada eliminó palabras que describían a Rusia como una amenaza directa y en cambio pedía cooperación con Moscú en materia de estabilidad estratégica.
“Lo consideramos un paso positivo”, dijo, añadiendo que Moscú examinará el documento de cerca antes de sacar conclusiones generales. “Debemos examinarlo más de cerca y analizarlo”, afirmó Peskov.
La nueva estrategia de 29 páginas establece el enfoque de política exterior de Trump como un “realismo flexible” y dice que la política estadounidense será impulsada por “lo que funcione para Estados Unidos”, según el documento.
Washington buscará una solución rápida al conflicto de Ucrania y tratará de restablecer la “estabilidad estratégica” con Moscú, donde las acciones de Rusia en Ucrania siguen siendo una preocupación central de seguridad, según el documento.
La estrategia fue revelada en medio de una estancada iniciativa de paz estadounidense, en la que Washington presentó una propuesta que respaldaba las principales demandas de Rusia en la guerra de casi cuatro años.
Trump ha hecho a menudo comentarios positivos y elogiosos sobre el presidente ruso Vladimir Putin, lo que ha llevado a sus críticos a acusarlo de ser blando con Moscú incluso cuando su administración mantiene sanciones a las acciones de Rusia en Ucrania.
Los aliados europeos, que dependen de la ayuda militar estadounidense para disuadir a Rusia, han observado de cerca el cambio y han expresado su preocupación de que un lenguaje más suave de Estados Unidos pueda socavar los esfuerzos de Moscú para enfrentarlo mientras continúa la guerra en Ucrania. Reuters


















