CIUDAD DEL VATICANO – El Papa León pidió el domingo un alto el fuego inmediato y la apertura de corredores humanitarios en Sudán, diciendo que seguía con “gran tristeza” los informes sobre horribles atrocidades en la ciudad de al-Fashir en Darfur.
“La violencia indiscriminada contra mujeres y niños, los ataques a civiles indefensos y los serios obstáculos a la acción humanitaria están causando un sufrimiento inaceptable”, dijo el Papa en su discurso semanal del Ángelus a las multitudes en la Plaza de San Pedro.
Pidió a la comunidad internacional que actúe “con decisión y generosidad” para apoyar los esfuerzos de ayuda.
La oficina de derechos humanos de la ONU dijo el viernes que cientos de civiles y combatientes desarmados podrían haber muerto a finales del mes pasado cuando la paramilitar Fuerza de Apoyo Rápido capturó al-Fashi, el último gran reducto del ejército sudanés en Darfur.
La ciudad cayó hace una semana después de un asedio de 18 meses, lo que provocó que miles de personas huyeran.
El Papa León abordó la situación en Tanzania el domingo y dijo que se habían producido enfrentamientos con numerosas víctimas tras las recientes elecciones nacionales. Llamó a todas las partes a evitar la violencia y “seguir el camino del diálogo”. Reuters
