WASHINGTON – El presidente republicano de Estados Unidos, Donald Trump, pidió la eliminación de la norma obstruccionista del Senado el 30 de octubre, para sortear un obstáculo demócrata durante el cierre del gobierno, que ahora cumple 30 días.
El obstruccionismo es la regla del Senado según la cual 60 de los 100 miembros acuerdan aprobar la mayoría de la legislación.
Los republicanos tienen una mayoría de 53 a 47 en el Senado y una mayoría de 219 a 213 en la Cámara de Representantes.
“Es hora de que los republicanos jueguen su ‘carta Trump’ y se deshagan del obstruccionismo de la llamada opción nuclear, y se deshagan de él ahora”, escribió Trump en las redes sociales.
No se vislumbraba un final para el cierre parcial del 30 de octubre, cuando los republicanos del Senado pidieron a los demócratas que respaldaran medidas provisionales de financiación antes del 21 de noviembre y luego exigieron negociaciones para ampliar los créditos fiscales federales.
Este tipo de crédito ayuda a los estadounidenses a adquirir cobertura de seguro médico privado a través de la Ley de Atención Médica Asequible.
Este cierre comenzó desde el pasado 1 de octubre.
Es el primer día del año fiscal federal 2026, ya que los republicanos y demócratas del Congreso no han logrado ponerse de acuerdo sobre la legislación para financiar los servicios gubernamentales.
El cierre podría costarle a la economía estadounidense entre 7.000 y 14.000 millones de dólares, recortando hasta un 2 por ciento del producto interno bruto en el cuarto trimestre debido a un déficit en el gasto gubernamental, dijo el 29 de octubre la Oficina de Presupuesto del Congreso, que no es partidista.
“Bueno, ahora estamos en el poder, y si hacemos lo que se supone que debemos hacer, cerraremos inmediatamente este ridículo ‘cierre’ que destruye el país”, publicó Trump el 30 de octubre.
Alrededor de 750.000 trabajadores federales han sido despedidos desde que terminó la financiación gubernamental.
La administración Trump ha tomado medidas para pagar a los funcionarios militares, policiales federales y de inmigración, pero otros empleados federales están trabajando sin remuneración. Reuters
