VALENCIA, España – El líder de la región de Valencia, en el este de España, dijo el 3 de noviembre que renunciaba bajo presión para manejar las catastróficas inundaciones de hace un año, que fueron las peores de su tipo en Europa en más de medio siglo.
El señor Carlos Mazón fue confrontado
Reiterados llamamientos a la dimisión
Y la semana pasada un monumento fue atestado por familiares de las víctimas.
29 de octubre de 2024 Lluvia torrencial
Mató a 229 personas y causó daños por miles de millones de euros, principalmente en los suburbios al sur de Valencia, la tercera ciudad más grande de España.
Las inundaciones desencadenaron un largo juego de culpas entre el gobierno nacional socialista y el gobierno regional del opositor conservador Partido Popular (PP).
“No puedo continuar”, dijo Mazón a los periodistas. “Sé que cometí un error, lo admito y sé que tengo que vivir con ellos por el resto de mi vida”.
Sin embargo, calificó de “terrible” la falta de apoyo del Gobierno del presidente Pedro Sánchez debido a maniobras políticas, añadiendo que quería añadir deuda al sufrimiento de los valencianos con préstamos para obras de reconstrucción.
El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, dijo que el gobierno había proporcionado hasta la fecha 8.200 millones de euros (12.300 millones de dólares singapurenses) en ayuda directa para la recuperación de Valencia. La dimisión de Mazón llegó demasiado tarde y debería haber convocado elecciones regionales anticipadas, añadió.
Mazón dijo que nadie había previsto que los ríos locales se desbordarían, culpando a la agencia meteorológica nacional AEMET y al organismo de control de la red hidrológica regional supervisado por el Ministerio de Energía y Medio Ambiente de España por no proporcionar una advertencia adecuada del desastre inminente.
El ministerio dijo en un comunicado que ambas agencias han trabajado con rigor técnico y proporcionado la información requerida.
Mazón dijo que no había pedido al gobierno central que declarara una emergencia nacional -lo que habría puesto a Madrid a cargo de la respuesta- porque el líder de la oposición, Alberto Núñez Fizú, líder del partido PP, le había aconsejado que no lo hiciera.
Feiju dijo que entonces le correspondía a Sánchez declarar una emergencia nacional el 3 de noviembre.
Los habitantes de las zonas afectadas acusaron al gobierno regional de haber avisado demasiado tarde, porque los edificios ya estaban bajo el agua y muchas personas se habían ahogado.
“Sigue repitiendo mentiras y haciéndose pasar por una víctima”, dijo a la radio SER Rosa Álvarez, presidenta de la principal asociación de víctimas de las inundaciones.
El analista Pablo Simón dijo que la renuncia de Mazón era contraproducente en términos tanto políticos como de posibles consecuencias legales.
El historiador Joan Esculis dijo que la dimisión de Mazón se debía menos a él personalmente y más a que el PP temía que el tema les estuviera dañando políticamente en Valencia y a nivel nacional. Las encuestas muestran que los mensajes antisistema del ultraderechista Vox están resonando.
Se espera que Mazón sea reemplazado por otro líder designado por el PP, aunque esta elección necesitará el apoyo de Vox, ya que al PP le faltan 10 legisladores para alcanzar la mayoría en la asamblea de Valencia. Su sucesor puede completar el mandato legislativo restante hasta mayo de 2027. Reuters


















