Un medicamento común para el colesterol podría prevenir un efecto secundario debilitante en cáncer pacientes, según un estudio.
Más del 75 por ciento de los pacientes experimentan cambios cognitivos (conocidos como “quimiocerebro”) durante el tratamiento, y alrededor del 35 por ciento informa síntomas persistentes años después.
Estos pueden implicar confusión mental y reducción de la capacidad de pensar, así como dificultades con la memoria, la resolución de problemas y el autocontrol.
No se sabe qué causa la quimioterapia cerebral y las opciones de tratamiento se limitan a cambios en el estilo de vida, como ejercicio, mejor sueño, una dieta saludable y manejo del estrés.
Pero ahora los investigadores estadounidenses creen que pueden tener una solución.
Las estatinas, medicamentos para reducir el colesterol, parecen proteger la función cerebral en pacientes con cáncer de mama y linfoma hasta dos años después de su tratamiento.
Los científicos dividieron en la mitad un grupo de prueba de más de 200 pacientes con cáncer y los monitorearon durante su tratamiento y durante los 24 meses siguientes.
La mitad de los participantes que tomaron estatinas obtuvieron un rendimiento promedio de diez segundos mejor en una prueba de función ejecutiva que los que recibieron píldoras de placebo.
Las estatinas, medicamentos para reducir el colesterol, parecen proteger la función cerebral en pacientes con cáncer de mama y linfoma hasta dos años después de su tratamiento.
El medicamento parecía proteger la función ejecutiva de los pacientes: las habilidades mentales de alto nivel utilizadas para planificar, organizar, resolver problemas y gestionar las emociones.
La investigadora principal, la Dra. Pamela Jill Grizzard, del VCU Health Pauley Heart Center en Richmond, Virginia, dijo: “El tratamiento del cáncer puede ser debilitante, y el deterioro cognitivo que surge del tratamiento de quimioterapia a veces puede durar mucho tiempo después de que concluye el tratamiento”.
‘Nuestros resultados sugieren que los pacientes que participaron en nuestro grupo de estatinas pueden haber mostrado algún beneficio cognitivo inesperado durante la quimioterapia y después del tratamiento.
«Si estudios futuros confirman un efecto beneficioso, las estatinas podrían convertirse en una herramienta valiosa para ayudar a los supervivientes de cáncer a mantener la función cognitiva y la calidad de vida.
“Proteger la mente es tan importante como proteger el corazón durante el tratamiento del cáncer”.
Ocho millones de personas en el Reino Unido toman estatinas para reducir el colesterol.


















